viernes, 17 de junio de 2011

Pío XII, opiniones enfrentadas

Ha llegado a mis manos una revista que no había visto nunca. Me ha llamado la atención que, en la parte superior de la portada, exhibe una frase de lo mas triunfal: "la revista gratuita mas leída por las familias católicas". Bueno, la verdad es que yo no soy muy lector de este tipo de publicaciones, sean gratis o de pago. Tampoco creo que les haya costado mucho ser la mas leido, no debe haber muchas de esta temática (o al menos eso pienso yo).

Pero aparte de la curiosidad por la revista, me ha llamado mucho la atención un artículo de lo mas elocuente: La iglesia contra Hitler, o los cristianos contra Hitler, era algo así. En un cuadro destacado, ensalza la figura del Papa Pío XII como un firme luchador contra el nazismo.

El artículo destaca las denuncias de las atrocidades, de las ayudas a los judíos dadas por un Vaticano salvador, etc... Todo esto está muy bien, pero hay cosas que el artículo obvia: El Papa nunca condenó el exterminio sistemático de los judios, y al igual que ayudó a salvar judíos el Vaticano también ayudó a huir a nazis buscados después de la guerra, proporcionando documentos y pasaportes.

Recomiendo una película: "Amén", del director Costa-Gavras. Basada en el libro El vicario de Rolf Hochhuth, narra la lucha de un alto mando de las SS para que el Vaticano condene los crímenes de los nazis con los judíos. Evidentemente, el Vaticano hace caso omiso y no lo condena. Por un lado los protege, y por el otro calla y mira hacia otro lado. Al final de la película es donde queda plasmado ese doble juego. También puedo recomendar el libro "El Papa de Hitler", de John Cornwell. Este aún es mas crítico con el Papa que la película antes recomendada. Aquí pongo algunas de las conclusiones del autor:

  • La asombrosa antipatía de Pacelli por los judíos venía de 1917, lo cual contradice que sus omisiones fueron hechas de buena fe y que “amaba” a los judíos y respetaba su religión.
     
  • Pacelli le reconoció al Tercer Reich que sus políticas antisemitas eran asuntos internos de Alemania. El Concordato entre Hitler y el Vaticano creó un clima ideal para la persecución de los judíos.
     
  • Pacelli no avaló la protesta de los obispos católicos alemanes contra el antisemitismo.
     
  • Pacelli intentó mitigar el efecto de las encíclicas de Pío XII al darle garantías diplomáticas privadas a Berlín, a pesar de conocer la abierta persecución de los judíos.
     
  • Pacelli estaba convencido de que los judíos se habían procurado su suerte: intervenir a su favor sólo podía llevar a la Iglesia hacia alianzas con fuerzas hostiles al catolicismo.

También puedo entender un poco al Papa en esa época convulsa. Una condena hubiera acabado con una invasión del Vaticano por parte de los alemanes, y el fin del Papado. Pero lo que no se puede es estar jugando a tres bandas, con los alemanes, los judíos, y los católicos. La verdad hay que contarla tal cual. No se puede distorsionar la verdad. Y que conste que no estoy juzgando a nadie, pero si el Papa obró en interés de su iglesia, pues que se plasme tal cual fué. No faltan los que afirman que los reproches a la actuación de Pío XII durante el nazismo son "una simplificación, y en parte calumnias". Cada parte barre para su casa....

1 comentario:

  1. No solo no condenó las persecuciones de los nazis sino que colaboraron con ellos. El obispo de Berlín, mano derecha de ese Papa , ayudó después de ña guerra a escapar a nazis perseguidos por sus crímenes, ocultandolos en diferentes monasterios católicos hasta que podían escapar a Latinoamerica.
    Un saludo

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